En 2010 se realizaron en la red pública 66.515 intervenciones

Mejorando todos los datos del año 2009…

La espera para una operación en Asturias es de 65 días, cinco menos que la media nacional

Cirugía maxilofacial y pediátrica son las especialidades que más retrasos acumulan


La Nueva España. Oviedo, Elena FERNÁNDEZ-PELLO

La sanidad asturiana presume de haber reducido el número de pacientes en lista de espera quirúrgica y de haber mejorado la demora media para ser intervenido, un día menos en 2010 y cinco por debajo de la media nacional de 2009. Quienes residen en esta comunidad aguardan por una operación quirúrgica un promedio de 65 días, entre dos y 21 menos que en el resto del país, según los datos del Servicios de Salud del Principado (Sespa), que también lleva a gala que ningún enfermo tenga que permanecer más de seis meses pendiente de su paso por quirófano.



La directora general de Servicios Sanitarios, María Luisa Sánchez, presentó ayer los datos relativos a 2010, destacando la agilidad del sistema asturiano respecto al nacional. La reducción de los tiempos de espera se ha conseguido, subrayó Sánchez, en un año particularmente complicado desde el punto de vista de la gestión. «Tuvimos que asumir el impacto de la gripe A, un concurso de traslados a mitad de ejercicio y la crisis económica, que nos obligó a realizar un ajuste presupuestario en junio», expuso.



Para el Sespa los datos son satisfactorios, sin embargo no son los mejores hasta ahora. En los años 2003 y en 2008 la espera fue inferior, tres días menos que en 2010. Y son varias las especialidades en las que se ha alargado. En dermatología, por ejemplo, donde ha pasado de 38 a 46 días (8 días); en cirugía pediátrica, de 67 a 75 días (también ocho días); oftalmología de 60 a 63 días o cirugía cardiaca de 68 a 70.



Las especialidades en las que el tiempo de espera es menor que en 2010 son cirugía general y digestivo -tres días, de 64 a 61-, otorrinolaringología -de 71 a 66-, traumatología -de 74 a 72-, urología -de 64 a 55-, angiología y cirugía vascular -de 69 a 62-, cirugía maxilofacial -de 83 a 76-, cirugía torácica -de 54 a 51- y neurocirugía -de 72 a 69-.



El año pasado la red de hospitales públicos del Principado realizó 66.515 intervenciones, 777 más que en 2009. Ambas son, según los responsables del Sespa, cifras «récord». El incremento de las intervenciones quirúrgicas se debe, explicó María Luisa Sánchez, al impulso de la cirugía ambulatoria que ha crecido en un año un 9,5 %.



Los pacientes que menos tiempo tuvieron que esperar en 2010 fueron los de dermatología, una media de 46 días, y los que más demora soportaron los de cirugía maxilofacial (76 días) y cirugía pediátrica (75).



Aunque una operación de cataratas se retrasa dos días más que en 2009, en Asturias llega antes que en el resto de España. Si un asturiano quiere operarse de cataratas en la sanidad pública deberá esperar 60 días, si lo hace en otra provincia 62 como media. En una operación de hernia inguinal el retraso es siete días menor que en el resto del país (66), en rodilla de dieciséis (79), en artrosis de cadera diecinueve (72) y las de varices se resuelven en 64 días, 22 menos que en otra comunidad.



El Sespa también destacó ayer, durante la presentación del balance de 2010, la reducción del tiempo que hay que esperar para acceder a la primera consulta con un especialista, la mitad que 2007. Aquel año fue de 71,5 días y en 2010 de 33,4. Aquí la demora es también inferior a la media de los servicios públicos del sistema nacional de salud, 25 días menos, según la directora general de Servicios Sanitarios.



En definitiva, en 2010, de los 16.454 enfermos en lista de espera en la sanidad pública asturiana la mayoría, 11.854, tardaron menos de tres meses en pasar por el quirófano. El resto, 4.600, entre tres y seis meses.



Que ningún asturiano espere más de seis meses para operarse es para el Sespa uno de sus grandes logros. En 2009 sólo 13 enfermos se vieron en esa situación, en 2010 ninguno. En 2008 el Servicio de Salud ya había logrado erradicar esas demoras tan largas, pero al año siguiente retrocedió.



En un año se redujo el número de entradas en la lista de espera quirúrgica en un 1,4%, hasta las 69.593 personas, y se incrementaron las salidas en casi un 1% -fueron 69.494-.



María Luisa Sánchez vinculó el envejecimiento de la población asturiana con la evolución de las listas de espera. «El incremento de personas mayores de 65 años a lo largo de 2010 es similar al de la lista de espera», observó. La edad, especificó, «conlleva más procesos degenerativos y más lista de espera».

65 días de espera para operarse

La demora afecta a 16.454 pacientes, 366 menos que el año anterior, y la actividad creció en 777 intervenciones

El Sespa mejora en 2010 todos los parámetros registrados en 2009

09.02.11 - E. M. | OVIEDO, en El Comercio.

Lo repitió hasta la saciedad la directora general de Servicios Sanitarios del Sespa: 2010 fue un año «especialmente complicado» tanto organizativa como económicamente y, sin embargo, los datos del Servicio de Salud del Principado de Asturias han mejorado en prácticamente todos los parámetros. A pesar del envejecimiento permanente de la población, -extremo al que el pasado año aludió la gerente del Sespa para justificar el crecimiento de las cifras de 2009 sobre las de 2008-, el número de pacientes en lista de espera quirúrgica el pasado año ha sido menor y el tiempo que esperan también; los hospitales públicos realizaron más operaciones en sus quirófanos y desviaron menos pacientes a los concertados, y ningún enfermo esperó más de seis meses para ser intervenido. Todos esos datos han propiciado que María Luisa Sánchez califique de «muy satisfactoria» la evolución de 2010.

Las cifras aportadas por el Sespa señalan que al cierre del ejercicio del último año, 16.454 pacientes engrosaban la lista de espera quirúrgica, que representan un 2,2% menos que los 16.820 del año anterior, «a costa de la rebaja en la demora que hemos podido registrar en el tramo de entre tres y seis meses, que se ha reducido un 2,8%», explicó la directora general de Servicios Sanitarios, en presencia de un silencioso Ricardo Arbizu, subdirector de Asistencia Sanitaria del Sespa.

Habida cuenta de que en todos los tramos de tiempo establecidos por el Sespa -de 0 a 90 días, de 90 a 180 y más de 180- se ha reducido el número de pacientes a la espera de un quirófano, la demora media del conjunto de los hospitales asturianos para atender a quienes precisan una operación quirúrgica es de 65 días, uno menos de los 66 del año pasado «y cinco menos que en el conjunto del Sistema Nacional de Salud, que es con el que nos tenemos que medir», afirmó María Luisa Sánchez. En ese sentido, resaltó el hecho de que en 2010 no se volviera a contabilizar ninguna espera por encima de seis meses, después de que «el hospital del Oriente» rompiera en 2009, con 13 pacientes, el objetivo logrado ya en 2008 de que ningún asturiano haya de esperar más de medio año para ser intervenido quirúrgicamente.

En ese aspecto también se remitió la directora general a la comparativa nacional, en la que Asturias vuelve a adquirir ventaja, toda vez que en el resto del país el 5,6% de los enfermos esperan más de seis meses para ser operados de sus dolencias -especialmente en traumatología, con un 9%-, mientras en Asturias no hay ninguno.

De las 14 especialidades médicas que enumera el Sespa, solamente cuatro de ellas registran incremento en la demora: la oftalmología, con tres días; la cirugía cardiaca, con dos, y la cirugía torácica y la dermatología, con uno cada una. En el extremo opuesto, la cirugía plástica y la maxilofacial, que redujeron en 17 días el tiempo de espera. No en vano, se ha incrementado en 777 el número de intervenciones quirúrgicas entre las 65.738 realizadas en 2009 y las 66.515 de 2010, una actividad que la directora general de Servicios Sanitarios atribuyó a «medios propios», en alusión a la reducción del 4,6% de pacientes quirúrgicos enviados a los hospitales concertados.

«Hemos obtenido indicadores muy satisfactorios en un año especialmente complicado, con el impacto que supuso la reorganización interna y la incidencia de la crisis financiera internacional, traducida en recorte presupuestario. Con todo y con ello, hemos consolidado y hasta mejorado los resultados del año anterior. Y lo hemos hecho con el esfuerzo de los profesionales del sistema asturiano de salud», concluyó, satisfecha, María Luisa Sánchez.

El tiempo para las consultas se queda en la mitad

La tendencia a la reducción de tiempos para asistir a una consulta de especialista iniciada en 2008 persiste, si bien los números siguen siendo altos. En el pasado año se han contabilizado 33,4 días de espera media, prácticamente la mitad de los 71,5 días de 2007, cifras que suponen 25 días menos que la media nacional del servicio de salud. Por especialidades, la más diligente, urología, que bajó 15 días la espera de cita. De 42 a 27. Y la menos, la cirugía torácica, que no sólo no reduce, sino que incrementa en 37 los días de espera. De 23 ha pasado a 60.