Esto es bajarse los pantalones, lo demás........
Cascos cede ante el PP y le ofrece una coalición para gobernar Asturias
Foro monta una negociación paralela a la de la FSA y pide entrevistas con todos los partidos
Francisco Álvarez-Cascos y Mercedes Fernández, ayer, al principio de su reunión en la Junta General del Principado. Pablo Lorenzana/
Por conservar el Gobierno, Francisco Álvarez-Cascos está dispuesto incluso a una reconciliación con sus excompañeros del Partido Popular. No lo estuvo hace diez meses, cuando ninguna de las dos partes se esforzó a fondo para lograr un pacto a pesar de que sumaban 26 diputados en la Junta, y está por ver que lo consiga ahora, después de que las elecciones anticipadas redujeran el bloque de la derecha a 22 escaños, uno por debajo de la mayoría absoluta. Cascos, sin embargo, se ha lanzado a intentarlo. Ayer ofreció a la candidata popular, Mercedes Fernández, unas condiciones muy favorables para su partido. Más allá del apoyo a la investidura, el líder de Foro contempla un ejecutivo de coalición e incluso consideraría la posibilidad de no ser el presidente si con esa renuncia se engrasara el acuerdo.
El resultado de la reunión, sin embargo, fue incierto. Hubo en el ambiente una frialdad matizada por las buenas palabras y las declaraciones de intenciones, pero faltaron compromisos concretos. Ambas fuerzas esperan volver a citarse en los próximos días. Cascos salió del encuentro con una sola idea que transmitir: lo importante es el programa y el impulso al cambio en Asturias. Fernández evitó comprometerse y se limitó a señalar el interés del PP por ayudar a que Asturias consiga un Gobierno estable tras las turbulencias de los últimos diez meses.
Como dictan la aritmética electoral y las coincidencias ideológicas, Cascos aseguró que el entendimiento con el PP es el principal objetivo de la ronda de contactos con todas las fuerzas parlamentarias que completará hoy. Foro plantea tres finalidades a cualquier alianza que selle. El primero, ceñido al ámbito del Parlamento, pasa por acordar el reparto de papeles en la sesión constitutiva de la Junta General y en la elección de los representantes de la Cámara en otros organismos e instituciones. El segundo, que afecta al Gobierno, puede admitir dos modalidades: un acuerdo de legislatura, que no exigiría la integración del PP en el Ejecutivo pero significaría su apoyo en las votaciones parlamentarias, o un auténtico gobierno de coalición. El tercero se refiere al programa para ese gabinete. Foro, abrazado a la política regeneracionista, plantea llevar a Asturias “hacia las políticas europeas de equilibrio presupuestario y solidaridad territorial”.
Dos opciones El presidente en funciones, aficionado a la montaña, como demostró con una excursión en la jornada de reflexión, parece empeñado en escalar de nuevo hacia el poder por una vía alternativa a la que intenta abrir el socialista Javier Fernández. Su interlocutora de ayer evitó pronunciarse acerca de si había cambiado la actitud de Foro o si esta vez sería posible el entendimiento que faltó el año pasado. “Lo que ha cambiado son los resultados”, recordó. Si Cascos y el PP no dan su apoyo a un candidato común, no podrán impedir la investidura del secretario general de la FSA, que cuenta con 22 votos seguros: los 17 de su grupo y los cinco de Izquierda Unida. Incluso unidos, solo pueden lograr un empate y deberían persuadir al único representante de UPyD para que reforzara su bando y desequilibrara así la balanza.
“No hay nada descartable”, según las palabras de Cascos, para conseguir ese objetivo. Incluso su renuncia a presidir el Principado y dejar ese cometido a los populares. Había anticipado esa posibilidad el miércoles, en una entrevista televisada, y no la corrigió ayer cuando recibió una pregunta directa sobre el asunto.
El Partido Popular, por su parte, mantuvo un tono frío y calculado.
Cherines Fernández dio por seguro que habrá nuevos encuentros en los que perfilar un posible acuerdo y se limitó a recordar que los electores decidieron el pasado domingo “un panorama abierto y lleno de posibilidades”, con cinco fuerzas presentes en la Junta. Para el PP, lo primordial es la estabilidad en el Gobierno regional y quiere estar seguro de acertar en su decisión para “unos dificilísimos momentos económicos, sociales y laborales”.
Si la necesidad de sumar esfuerzos para llegar al poder y cerrar el paso a la izquierda alienta la verosimilitud de un pacto entre PP y Foro, el precedente del año pasado y las críticas subidas de tono de Cascos hacia los dirigentes regionales de su antigua formación abonan el escepticismo. Un sector de los populares no es partidario de firmar el armisticio con el exvicepresidente de José María Aznar. En el Parlamento se comenta ya la posibilidad de que Carmen Maniega, representante de la junta local de Avilés, una de las más señaladas por Foro, no recoja su acta de diputada autonómica y permanezca como parlamentaria en el Congreso, para el que fue elegida el pasado mes de noviembre.
No es el único escollo. Los nombres afines al delegado del Gobierno, Gabino de Lorenzo, tampoco ven clara la reconciliación entre las dos personalidades enfrentadas que aspiran a liderar la derecha asturiana. Las aspiraciones de Foro, además, pueden chocar con los planes de austeridad de Mariano Rajoy. Cascos no admite ni la supresión de los fondos mineros ni el recorte en obras públicas que incluirán los presupuestos del Estado.
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