El fin no justifica los medios, pero estos conseguirán su fin "privatizarlo todo"
El Gobierno propondrá a las autonomías implantar el copago en función de rentas
Lo hará en el Consejo Interterritorial del día 18 después de que la ministra advirtiera ayer de que «la sanidad es insostenible»
12.04.12 - 00:27
Pagar los medicamentos en función del nivel de renta de cada paciente. Es lo que tiene en mente el Gobierno de Mariano Rajoy para conseguir recortar 7.000 millones de euros del actual sistema sanitario. La propuesta, de la que ayer ya habló en los pasillos del Congreso la ministra de Sanidad, Ana Mato, se presentará oficialmente a las autonomías en la reunión que mantendrá el próximo miércoles, día 18, el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud. Mato desveló la primera incógnita sobre la inminente reforma sanitaria al asegurar que veía factible aplicar «este mismo año» un sistema de 'copago' de recetas en función de la renta de los pacientes, por tramos. Actualmente, salvo los enfermos crónicos y jubilados, todos los ciudadanos pagan el 40% de los fármacos. Según la ministra, gracias al cruce de datos informáticos de Hacienda, Seguridad Social y Sanidad, la puesta en marcha de este nuevo sistema de 'repago', no sería ni complicado ni costoso. Eso sí, dejó claro, que la medida debería ser refrendada por el Consejo Interterritorial, es decir, por las autonomías, que son las que tienen ahora las competencias en materia sanitaria (no así en cuestión de copago de medicinas que sigue estando en manos del Gobierno central).
Mato compareció en el Congreso en respuesta a una interpelación del PSOE. Fue allí donde dijo que «la sanidad es absolutamente insostenible en este momento», con una deuda que cifró en 16.000 millones de euros, de la que a Asturias le correspondería 303 millones, según los datos que en enero pasado dio la Consejería de Sanidad del Principado.
Uno para todo el país
El ministerio está trabajando también en la elaboración de un catálogo de servicios sanitarios básicos que tendrán que cumplir, por ley, todas las comunidades. Fuentes de Sanidad precisaron de que no se trata de reducir prestaciones sanitarias que precisen los ciudadanos «sino de establecer un mismo catálogo en todo el país» y que no haya disfunciones entre autonomías.
Se limitarán aún más
La cartera de Ana Mato considera que estos tratamientos no son esenciales y, pese a que los seguirá financiando, el acceso a los mismos se restringirá aún más. Sólo costeará los casos patológicos previamente diagnosticados, lo que deja fuera a las pacientes lesbianas, entre otras muchas. Tampoco cubrirá las vasectomías como método anticonceptivo. Los beneficiarios deberán justificar la existencia de una enfermedad o la posibilidad de transmitir una dolencia grave a su descendencia. Los recortes en materia de fertilidad fueron criticados ayer por el Centro de Fecundación in vitro de Asturias (Cefiva), que acusó al gobierno actual y a los políticos en general, de «ver los tratamientos de reproducción asistida y los problemas de infertilidad como si fueran un lujo», lamentó Pedro de la Fuente.
Control férreo
Acabar con las irregularidades del llamado turismo sanitario es otro de los objetivos. Se trata, en la mayor parte de los casos de turistas europeos que vienen a España a recibir tratamiento.
De momento, no se baraja
Sanidad no sopesa, al menos, de momento, implantar el euro por receta que ya aplica Cataluña, ni el pago por acudir a consulta. Tampoco que se abone un ticket diario por hospitalización, como propuso ayer el consejero catalán de Salud.
Compras y tarjeta sanitaria única
La idea es que en lugar de que cada consejería o cada hospital negocie y compre de forma individual, se haga a través de una central de compras. También se sopesa crear una tarjeta sanitaria operativa en todo el país.
0 comentarios