Los trabajadores sanitarios incrementan la tensión y ya ven la huelga más cerca

Cientos de personas se manifestaron contra los recortes y llegaron a la Presidencia del Gobierno, donde intentaron entrar al no ser recibidos

El Sespa abre desde ayer 29 centros de salud urbanos dos días a la semana por la tarde.

Blanco asegura que se esfuerzan «para mantener el salario de los profesionales».

 Lne.es » Sociedad y Cultura Oviedo, M. S. MARQUÉS

 La tensión no afloja. La marcha de los trabajadores de la sanidad asturiana que ayer se desplazó desde las puertas del Sespa hasta la sede de la Presidencia del Gobierno estuvo a punto de terminar en altercado. La manifestación, que discurrió pacíficamente coreando distintos lemas contra los recortes y a favor de la unidad y la negociación, mostró su peor cara al ver impedido los integrantes su intento de ser recibidos por el presidente del Principado, Javier Fernández.

No había cita previa, pero una vez a las puertas de la sede presidencial, los representantes de los sindicatos CC OO, SATSE, USAE y SICEPA intentaron ser escuchados al más alto nivel. Tras negociar con los mandos policiales, comunicaron a los manifestantes mediante megáfono que había posibilidades de que alguien del interior los recibiera. Los minutos fueron pasando sin que nada se moviera en la sede del Gobierno, y los ánimos comenzaron a caldearse. Entonces alguien propuso, a falta de respuesta, intentar en bloque el acceso al interior. Fue dicho y hecho, lo que motivó que de inmediato la Policía se plantase a las puertas de Presidencia para impedir el acceso y un posible altercado.

El malestar de los manifestantes fue en aumento, y se oyeron gritos que pedían la toma del Parlamento. Tras minutos de tensión con los manifestantes pegados a las mismas puertas de la sede del Gobierno, ya cerradas para mayor seguridad, la Policía trató de retomar la calma pidiendo como primer paso para entablar el diálogo que se despejaran las escaleras de acceso, lo que fue desoído por los trabajadores, que respondieron con una sentada en las mismas escaleras. Pitadas y peticiones de dimisión se sucedieron, hasta que finalmente la concentración retomó la marcha de vuelta al Sespa, donde un grupo de representantes sindicales sigue con un encierro que hoy llega a su octavo día.

 Por la mañana, durante un encuentro con los medios de comunicación, las centrales sindicales anunciaron su decisión de mantener el encierro y se mostraron pesimistas sobre la solución del conflicto abierto con la Consejería de Sanidad por la ampliación de la jornada laboral. Presumen cada vez más cerca la convocatoria de una huelga si las autoridades sanitarias «persisten en su posición de no introducir cambios en el coeficiente ponderador de la jornada nocturna».

 Francisco Menéndez (SICEPA-USIPA) consideró ayer «fuera de lugar» las declaraciones realizadas anteayer por el consejero de Sanidad del Principado, Faustino Blanco, al que acusó de tener un grave desconocimiento de la realidad y de mostrar, pese a lo que dice, poca disposición para el diálogo. «Nos encontramos con un muro que no escucha y que no quiere negociar. Se nos acusa de imponer medidas durísimas, cuando lo único que pedimos es el cambio de las condiciones del turno rotatorio de noche».

 Para Francisco Menéndez, como para los representantes del resto de centrales sindicales, «la ponderación de la jornada nocturna que se quiere imponer supondrá la pérdida de 400 puestos de trabajo, y ése es el principal punto de la movilización». Tras acusar al consejero de Sanidad de «no tener ni idea de lo que está diciendo» y de reírse de 15.000 trabajadores, los sindicatos insisten en no descartar la posibilidad de una huelga si no hay un cambio de interlocutor y no se mejoran las condiciones del turno de noche.

 Alejandro González, de CC OO, retó a Faustino Blanco a decir cuántos trabajadores van a cesar en los centros sanitarios del Principado por la nueva jornada. «No hablamos de interinos, sino de eventuales, trabajadores que llevan cinco años y a los que no se renueva». Tras apuntar que pueden ser más de 1.000, insistió en que la interlocutora no es la gerente del Sespa, Celia Gómez, en lo que coinciden con otros compañeros.

 La «penosidad de la jornada nocturna» es para Ramona García, de UGT, «el único punto» con el que discrepan del Principado, ya que el sindicato defiende que la ponderación del turno rotatorio vuelva a ser del 1,28, como en el resto de las comunidades. A juicio de los encerrados, Asturias sufre una discriminación con respecto al resto de España, donde el acuerdo se cifra en 60 horas anuales menos.

 Así se manifestó María José Fernández, de USAE, que asegura que no están pidiendo nada que no tengan otras comunidades. «Si reducen la plantilla, nos vamos a quedar en cuadro, y estamos trabajando con personas». Fernández lanzó una llamada de atención a los responsables políticos: «Que tengan claro que la huelga va a salir adelante si el Consejero no se decide a convocar una reunión. No pedimos dinero, miramos por los trabajadores».