Arcelor también pretende recortar un 25% lo que paga a las auxiliares

 

Se reunió ayer con las empresas, una semana después de anunciar un ajuste del 25% en el sueldo de sus propios trabajadores

 

14.09.12 - 02:42 - ENRIQUE ARENAS ENRIQUE ARENAS | GIJÓN.

Los sindicatos dicen que el anuncio es «una bomba» y aseguran que «no lo vamos a permitir».ArcelorMittal vuelve a sacar la tijera. El ajuste que la multinacional planteó la pasada semana a los trabajadores de sus factorías españolas lo trasladó ayer a la industria auxiliar de las factorías de Gijón y Avilés. La dirección de Arcelor en Asturias reunió a los responsables de las empresas auxiliares para plantearles una modificación de sus contratos para reducir los costes en un 25%.

 

A la mayor parte de auxiliares les cogió por sorpresa la comunicación y ayer no hubo reacciones, pero los sindicatos ya anunciaron que «habrá movilizaciones contundentes».

La Federación de Empresarios del Metal y Afines del Principado de Asturias (Femetal) también se mostró sorprendida por la decisión de Arcelor y declinó valorar el asunto. En fuentes empresariales se estima que de llevarse a cabo la medida muchas pequeñas compañías podrían situarse en una posición económica comprometida. Todas deberán, en cualquier caso, valorar si deciden repercutir la medida a sus trabajadores o no.

La dirección de ArcelorMittal comunicó la pasada semana a los sindicatos un duro ajuste para rebajar los costes laborales en las plantas españolas en un 25% y les anunció que si no había acuerdo antes del próximo día 20 las pondría en marcha mediante la utilización de las prerrogativas de la nueva normativa laboral. Cinco días después, los representantes de los trabajadores respondieron a la empresa que no aceptan negociar en esas condiciones y la multinacional inició las gestiones para descolgarse del convenio y aplicar los ajustes aunque no haya acuerdo con los trabajadores.

La propuesta de la empresa, que fue respondida por los representantes de los trabajadores con la convocatoria de dos jornadas de huelga (los días 20 y 29 de este mes), prevé una reducción salarial del 10% al convertir la prima de producción fija en un complemento variable; un 6% de incremento de la jornada anual (aumento de la jornada en 12 días anuales); un 6% de congelación salarial durante los próximos tres años (cálculo de un IPC anual del 2%) y un 3% de congelación de la antigüedad.

El grupo avilesino Daorje y la unión temporal de empresas TSK-Isastur son las principales empresas auxiliares de ArcelorMittal en Asturias en la actualidad. Daorje llegó a un acuerdo con la multinacional a finales de diciembre de 2009 para hacerse cargo de todo el mantenimiento mecánico de las factorías de Gijón y Avilés, en competencia con las empresas Montajes Nervión y Montrasa-Maesa. TSK-Isastur sigue encargándose del mantenimiento del bloque eléctrico en las dos factorías. Con la reordenación de las auxiliares, Arcelor puso en marcha también en aquel momento la internalización de 300 trabajadores en la empresa matriz.

Reacciones

El descenso de pedidos de la multinacional ya había obligado a las empresas auxiliares de Arcelor a regular de empleo el pasado año a un importante número de sus trabajadores.

Los sindicatos anunciaron ayer, tras conocer el nuevo ajuste, que se opondrán con todas sus fuerzas a los intentos de la multinacional de abaratar los contratos de las auxiliares. A la espera de conocer más detalles sobre el planteamiento de la multinacional y de las compañías auxiliares, los trabajadores de las empresas celebrarán asambleas hoy para adoptar decisiones.

El secretario de Política Industrial de CC OO, Nicomedes Sánchez señaló que «nos oponemos de forma rotunda al recorte, porque la industria auxiliar no es que esté boyante precisamente como para afrontarlo». Según Sánchez, la propuesta de la empresa «es suicida y nos aboca a una conflictividad innecesaria, porque habrá una respuesta contundente por parte de los trabajadores. Posiblemente no lo han pensado bien porque de trata de una bomba de relojería».

El responsable de Comisiones Obreras indicó también que «el planteamiento es descabellado y los empresarios no lo van a asumir. Creemos que la empresa está intentando que haya conflictividad en las factorías de aquí a fin de año para culparnos de las pérdidas que se acumulan, pero no lo van a lograr».

Manuel Ángel Rey Castro, responsable de La Unión Sindical Obrera (USO) en las auxiliares, también mostró su opinión sobre el ajuste. Señaló, sin embargo, que «habrá que esperar la decisión de las empresas auxiliares».