Sanidad redujo en casi 50 millones su gasto en farmacia durante 2012

El copago y la retirada de fármacos de la cartera pública dejaron la factura en 275.000 millones, un 15% menos

 Lne. 27.01.2013 | 03:29 Oviedo, E. G.

El copago farmacéutico y, sobre todo, la retirada de un buen número de medicamentos de la financiación pública supuso en 2012 en Asturias un ahorro de 49,2 millones de euros o, lo que es lo mismo, más del 15% del total de lo gastado el año anterior. Las medidas de ahorro decretadas desde el Gobierno central, en vigencia desde el pasado mes de junio, se reflejan con rotundidad en los gráficos adjuntos.

En esas macrocifras asturianas también influyen un descenso en el número de fármacos prescritos y una pequeña reducción media en el precio de los medicamentos. El número de recetas financiadas por el servicio público de salud en el Principado sufrió un descenso de 1,2 millones sobre las de 2011 (casi un cinco por ciento menos), y el precio medio de la receta se ha reducido en un 10,76%.

Los asturianos retiraron en 2012 fármacos con receta por valor de 275.207 millones de euros, frente a los 324.434 millones del año anterior. Una reducción de gasto que, a juicio de la Consejería de Salud, «se ha producido a costa de trasladar una parte mayor del gasto sanitario a los ciudadanos». Y es que, calculadora en mano, el conjunto de los asturianos ha tenido que contribuir al menos con 7,9 millones de euros más, además de con sus impuestos, a la financiación de la sanidad pública en relación con años anteriores.

También en junio se dejaron de financiar 425 productos farmacéuticos empleados para síntomas leves, que los pacientes deben pagar ahora de su bolsillo. Los casi ocho millones en que aumentó la aportación por el copago no incluyen el gasto de los asturianos en este tipo de fármacos.

El Principado alerta del peligro de que las medidas de ahorro acaben provocando «un efecto contrario al que se persigue, en personas con determinadas patologías que se vean tentadas a dejar de tratarse por la dificultad para hacer frente al coste que supone su enfermedad».

El ahorro pronto incluirá también el transporte sanitario no urgente, las prestaciones ortoprotésicas y los alimentos dietoterápicos.

El nuevo copago de farmacia reduce en 50 millones el gasto en medicinas

En 2012 se recetó menos y los usuarios pagaron más. La factura anual en medicamentos fue de 275 millones de euros, un 15% inferior al de 2011

 El Comercio. 27.01.13 - 01:38 - LAURA FONSECA | GIJÓN.

El nuevo copago farmacéutico que desde julio obliga a los pensionistas a pagar por sus medicinas y que eleva los tramos de financiación del resto de usuarios, ha dejado en Asturias un ’ahorro’ cercano a los 50 millones de euros. En concreto, la caída a lo largo de 2012 fue de 49,2 millones según los datos preliminares avanzados ayer por la Consejería de Sanidad. Es la primera vez que Asturias consigue una reducción tan importante en su gasto en medicamentos. Las cifras que maneja el Principado señalan que la factura farmacéutica de 2012 se quedó en los 275,2 millones de euros, un 15% por debajo de los 324,4 millones que se habían desembolsado por el mismo concepto el año anterior.

 Está claro que el gasto de farmacia bajó en 2012, primer año de aplicación del nuevo copago, pero no ha sido un ahorro en el sentido estricto de la palabra, ya que la reducción se ha conseguido porque los usuarios aportaron más a las arcas regionales por las medicinas (pagaron más por cada fármaco), al tiempo que compraron menos. Así lo confirma el balance del Principado, que asegura que debido al nuevo sistema de financiación aprobado por el Ministerio de Sanidad, los asturianos pagaron 7,9 millones de euros más por sus medicinas. Esta cantidad se corresponde «con la incorporación de las aportaciones mensuales que ha tenido que afrontar la ciudadanía desde julio, fecha en que entró en vigor la reforma aprobada por el Ejecutivo del PP», reza la nota del Gobierno regional. La contribución que los asturianos hace cada mes ronda entre 2,6 y 2,8 millones, por lo que en 2013 puede que llegue a los 31 millones de euros anuales.

 Los asturianos pagaron más por sus recetas, pero también demandaron menos fármacos. No aclara el Principado si el descenso en 1,2 millones de prescripciones detectado en 2012 (primer año en que baja el número de recetas) está originado por el nuevo copago. Sí indica, por contra, que las medidas del PP «han podido provocar que algunos pacientes se hayan visto obligados a prescindir de medicación por carecer de medios económicos».

 Otro de los recortes que han contribuido a constreñir la partida en medicamentos fue la retirada de la financiación pública de 425 fármacos. Bautizada como ’medicamentazo’, entró en vigor en junio pasado y afectó a productos utilizados para síntomas menores pero que son muy demandados por los enfermos que ahora los tienen que pagar. Entre los fármacos excluidos figuran el Almax, Fortasec o Voltarén. Entre los ocho millones que costó el nuevo copago al bolsillo de los asturianos no se incluyen los efectos del ’medicamentazo’, por lo que la pérdida para los usuarios es todavía mayor.

 Por encima de lo previsto

En cualquier caso, el ’ahorro’ de 50 millones de euros superó las previsiones más optimistas. El pasado año, nada más entrar en vigor el copago en función de renta, el Principado cifró en 14 millones la contención anual que se preveía alcanzar con esta nueva medida, por cierto, muy criticada por el Gobierno asturiano. Ayer, la Consejería de Sanidad insistió en calificar la decisión del PP como «un impuesto a la enfermedad». El copago farmacéutico, al que en breve se sumará el transporte sanitario no urgente, las prestaciones ortoprotésicas o los alimentos dietoterápicos, «suponen gravar con un nuevo impuesto a la enfermedad, lo que perjudica seriamente a quienes más necesitan de los recursos sanitarios». El Principado cree que la reducción en el consumo de fármacos conseguida en 2012 «está basada en criterios de eficiencia económica y escasamente clínicos, lo que podría conseguir un efecto contrario al que persigue, haciendo que personas con determinadas patologías se hayan visto tentadas a dejar de tratarse por la dificultad de hacer frente al coste que supone su enfermedad», dice.