UN VIDRIO EN FORMA DE CRUZ PUEDE REVOLUCIONAR LA ASISTENCIA DE PACIENTES.

La universidad diseña un sensor para analíticas caseras.

 

El dispositivo tiene usos en biomedicina, medio ambiente y controles de calidad.La iniciativa surge de la empresa Micrux, una de las spin-off asturianas.

RU Nn pequeño vidrio con dos canales casi imperceptibles que forman una cruz, o, según como se mire, una espada. A primera vista, no resulta muy llamativo, pero se trata de un sensor gestado en la Universidad de Oviedo como se fabrican pocos en el mundo. De estos vidrios ha brotado una pequeña empresa que ha comenzado a diseñar, producir y utilizar estos dispositivos, capaces de efectuar por sí mismos todo el proceso de análisis químico. Este mes presentarán un modelo mejorado de la tecnología que los ha lanzado al mercado internacional.

 

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