Los asturianos no ven mermada su salud pese a la crisis
La percepción de los ciudadanos sobre su bienestar mejora pese a la precarización de las condiciones laborales, según una encuesta del Principado
11.11.2013 | 08:47
Pacientes en el centro de salud de El Quirinal (Avilés). Oviedo, Pablo ÁLVAREZ La omnipresente crisis está deteriorando de forma notable la calidad de vida material de las personas. La buena noticia es que no está mermando -al menos por el momento- su estado de salud. Ésta es la principal conclusión de la "Encuesta de salud para Asturias 2012", que acaba de hacer pública la Consejería de Sanidad del Principado. El sondeo concluye que, con respecto a 2008, ha aumentado en cuatro puntos (de 73 a 77 sobre 100) la autovaloración de su estado de salud que efectúan los habitantes de la región.
Son casi el 76 por ciento los varones que sostienen que su salud fue buena o muy buena en los doce meses precedentes. En el caso de las mujeres, la tasa es inferior: no llegan al 64 por ciento las que afirman lo mismo. En la franja de edad que va de los 15 a los 29 años están satisfechos con su estado de forma casi el 92 por ciento de los ciudadanos de la región.
Esta mejora de la autopercepción de la salud contrasta con la evolución negativa de factores que supuestamente inciden de forma severa sobre la vida de las personas. "Casi todos los determinantes de este tipo han empeorado desde 2008", subraya Mario Margolles, jefe de Epidemiología de la Consejería de Sanidad, y concreta los datos: "Está en desempleo el 33 por ciento de los entrevistados, y un 29 por ciento, jubilados". El paro afecta más a las mujeres. Se aprecia "un gran descenso en la satisfacción con el trabajo al cambiar las condiciones laborales en las empresas". Asimismo, la encuesta corrobora una sustancial caída de la proporción de personas que no temen perder el trabajo (36 por ciento en 2008, 15 por ciento en 2012). Crece la temporalidad de los empleos y aumentan los horarios irregulares en el ámbito laboral.
¿Cómo se conjugan las dos conclusiones citadas? Los responsables de la Consejería de Sanidad ofrecen una respuesta: "Sólo es posible gracias a que Asturias ha conseguido mantener los tres pilares básicos de su sistema de protección social: el acceso a una buena educación, unos servicios sociales que protegen a quienes más lo necesitan y un sistema sanitario que resuelve bien sus problemas", explica el director general de Salud Pública, Julio Bruno.
Los responsables sanitarios ven refrendada su tesis por los resultados de la encuesta relativos a la opinión de los asturianos sobre los servicios sanitarios. Un 65 por ciento de las personas entrevistadas valoran la sanidad pública asturiana con un "bien" o un "muy bien". La atención primaria es bien valorada (y ha mejorado) por un 84 por ciento. La buena valoración de las consultas de especialistas afecta al 66 por ciento, y la de las urgencias hospitalarias, al 60 por ciento. En definitiva, "la gente no tiene la sensación de que el sistema sanitario público haya empeorado a pesar de los ajustes", indica Mario Margolles, quien añade que esta situación podría verse alterada en el caso de que los copagos que se exigen al usuario se incrementen de forma notable.
En el epígrafe de consumo de medicamentos se verifica un descenso con relación a 2008. Un 43 por ciento indica que no ha ingerido ningún fármaco en la última quincena, respuesta que hace cinco años dio el 38 por ciento de los encuestados. Las medicinas más usadas son las prescritas para el dolor y para la tensión arterial.
Más alcohol, menos tabaco
Un factor positivo para la salud, propiciado por la nueva legislación y también por la crisis, es la reducción del consumo de tabaco. Un 29 por ciento de la población fuma, la mayoría diariamente. Ha aumentado el fumador ocasional. Fuman más los hombres que las mujeres. Comparado con 2008, el consumo medio diario ha bajado de 16 a 14 cigarrillos diarios. "Ha disminuido más el consumo de tabaco que el número de fumadores", precisa el jefe de Epidemiología de la Consejería de Sanidad, quien agrega -como dato relevante para la salud- que "la exposición involuntaria al humo de tabaco ha bajado considerablemente en todos los espacios gracias a la legislación implantada".
Justo lo contrario ocurre con el consumo de alcohol. La Consejería de Sanidad considera "problemática" la extensión del fenómeno de los atracones etílicos. "Se puede considerar que un 6 por ciento de los hombres y un 2 por ciento de las mujeres practica el "binge drinking" ("ingesta excesiva de alcohol") semanalmente". La bebida más consumida en Asturias es el vino, seguida de cerveza y sidra en días laborables. En los festivos predomina la sidra.
La encuesta verifica una ligera mejoría en el capítulo de malos tratos. Una de cada veinte personas adultas refiere haber padecido violencia o abuso físico o psicológico alguna vez, una tasa inferior a la registrada en 2008. Es más frecuente que las víctimas del maltrato sean mujeres. Las personas de edades medias (45-64 años) han sufrido con más frecuencia situaciones de violencia. El fenómeno del maltrato es fundamentalmente un problema de violencia doméstica o familiar que afecta más a las mujeres, según concluye el sondeo.
0 comentarios