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Menos horas extra pero mejor pagadas

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La Nueva España. 24.04.11 - D. DE MIGUEL | GIJÓN.

Foto: Trabajadores en las obras de construcción del viaducto de la Concha de Artedo, en el tramo Muros-Las Dueñas de la A-8. :: JORGE PETEIRO

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La crisis se deja sentir en esta fórmula de trabajo, con los peores registros de la década

Asturias pasa de la cola del pelotón a la cabeza en la cotización de las horas, que ahora se pagan a 17,32 euros

El desplome del mercado laboral, con 79.600 asturianos en paro según la última Encuesta de Población Activa (EPA), no ha supuesto ningún impedimento para que en 2010, los asalariados asturianos hicieran más de 1,2 millones de horas extraordinarias. Se trata, no obstante, de una de las cifras más bajas de la última década, aunque con una cotización mejorada. De hecho, el Principado logró pasar el año pasado de la cola del pelotón a la cabeza en el ’ranking’ de su coste por autonomías: de cotizarse hace tres años a 14,87 euros, las horas extra subieron en 2010 a 17,32 euros, por encima de la media nacional, con un coste de 16,18 euros.

Pero lo cierto es que la crisis se ha dejado sentir en esta fórmula de trabajo y los empresarios no necesitan recurrir ya con tanta frecuencia a esta forma de extensión de la jornada laboral. Aunque durante el pasado ejercicio, de la mano de una ligera mejoría de la actividad, el cómputo final de horas extra mejoró con respecto al registrado en 2009, las cosas no son como antes. Las estimaciones realizadas por la Encuesta de Coyuntura Laboral del Ministerio de Trabajo así lo prueban, al desvelar que fue 2008 el ejercicio en que más se tiró de esta forma de trabajo, con 1,7 millones de horas extraordinarias en Asturias. Esto es, un 30% más que el año pasado.

El estudio del ministerio que dirige Valeriano Gómez constata que la realización de esta modalidad de jornada guarda muchos paralelismos con la marcha de la actividad económica. Todavía en 2008, año en que la crisis únicamente se dejó sentir en el último trimestre, rebasaban los 1,7 millones. Pero pese a que en 2009 alcanzaron una de las cotas más bajas en diez años, fue en el cuarto trimestre de 2010 cuando menos horas se trabajaron, con 215.500, que contrastan con las 267.000 trabajadas en el mismo periodo de 2009.

Aunque la retribución de las horas extraordinarias puede realizarse directamente en dinero o con tiempo de descanso, la encuesta trimestral del coste laboral que elabora el Instituto Nacional de Estadística (INE) ofrece información sobre cuánto le suponen al empresario. Así, desde el inicio de la crisis y al igual que ha ido sucediendo en el conjunto del país, su coste ha ido creciendo paulatinamente, pasando de los 14,87 euros que se pagaban por hora en 2008 a los 17,32 euros con los que se cerró 2010.En el conjunto de España, esa cifra ha pasado en los mismos periodos de 15,35 euros a 16,18.

80 horas anuales

Las horas extraordinarias están reguladas por ley y limitadas a 80 horas anuales, salvo que se trate de las denominadas de ’fuerza mayor’ -por ejemplo, reparar siniestros u otros daños extraordinarios y urgentes en la empresa-, que son obligatorias. Pueden ser pagadas con dinero o con tiempo de descanso, como mínimo al precio de una hora ordinaria. Otra de sus características es que están sujetas a cotización.

Con frecuencia, los empresarios que tienen miedo a ampliar su plantilla recurren a las horas extraordinarias cuando registran puntas de carga de trabajo. Estas horas han sido y son muy habituales en algunos sectores industriales, financieros y de seguridad, y la polémica sobre ellas salta con frecuencia a la actualidad laboral.

La política de los sindicatos es limitarlas dentro de sus objetivos generales de reparto del trabajo, y muchos convenios de empresa recogen cláusulas específicas al respecto. Pero son muy fáciles de ocultar cuando el empleador y el trabajador están de acuerdo en hacerlo. La forma más habitual es pagarlas como si fueran dietas, en forma de retribución voluntaria o incentivos, con lo que se escapan a las limitaciones que impondría el control legal.

UGT hizo públicas esta semana las líneas maestras de un análisis sobre el problema, según el cual el 46% de las horas extra de 2010 no se pagaron. En el informe ’La evolución del tiempo de trabajo’ el sindicato denuncia que estos datos siguen fomentando la precariedad laboral en España. Asegura que los trabajadores dejaron de percibir ingresos por un total de 2,5 millones de horas extras, frente a tres millones de horas que sí fueron remuneradas. El mayor número de horas se realizó en empresas de más de 250 trabajadores, mientras que descendió en las compañías con más de 50 trabajadores.

Entre las comunidades en las que el número de horas extraordinarias se redujo se encuentran Andalucía, Asturias, Canarias, Cantabria, Cataluña, Comunidad Valenciana, Extremadura, Galicia, Madrid, Navarra, País Vasco y La Rioja.

Para UGT, los excesos detectados condicionan la calidad de vida del trabajador e impiden la creación de empleo, al camuflar la empresa sus necesidades reales de contratación. Además, argumenta, «las horas extraordinarias recortan los derechos laborales de los trabajadores, especialmente del colectivo joven y de las mujeres, y perjudican la salud de los mismos, ya que al realizar un mayor número de horas laborales se reduce el tiempo de descanso».

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