Y en sanidad sin desarrollar una triste OPE desde que se asumieron las competencias hace 9 años

¿Apostando al que alguien vendrá que bueno me hará?

La inoportuna carta de Areces

«Encima, recochineo», responden los funcionarios a la misiva que les envió el Presidente felicitándoles por su profesionalidad y recordándoles los logros de su Gobierno en la Administración

Oviedo, J. A. ARDURA / E. L., en La Nueva España

Los sindicatos de funcionarios del Principado han recibido con una mezcla de perplejidad e indignación la carta que el presidente socialista Vicente Álvarez Areces ha remitido a los empleados públicos para despedirse, agradecerles su «trabajo, honestidad y lealtad», pero también para recordarles los logros que, a juicio del Presidente, puede apuntarse su Gobierno. Tras leer la carta, los sindicatos recuerdan los recortes salariales y la batalla judicial contra los nombramientos a dedo en esta última legislatura, y son contundentes: «Es una tomadura de pelo. Encima, recochineo».

Álvarez Areces escribe que durante sus doce años de Gobierno la Administración asturiana, a través del desarrollo de competencias, pasó de 6.000 a 36.000 empleados públicos, incorporando «servicios tan estratégicos como la sanidad, educación y justicia». El Presidente añade: «En este desarrollo he intentado a través de diversas medidas fortalecer la función pública y dignificar el trabajo en la Administración. Y sigue: «Afrontamos épocas difíciles, pero también aprendimos a responder a los retos. Entre todos y desde la pluralidad hemos contribuido a desarrollar un modelo de Administración cercana, capaz de responder con eficacia a las necesidades de los asturianos y asturianas como así lo reconocen en la evaluación de los servicios públicos esenciales y en el alto desarrollo de la Administración electrónica».

El Presidente dedica sus mejores palabras a los funcionarios («Ha sido para mí un privilegio contar con un conjunto de empleados/as públicos que en los distintos campos de su actividad profesional ponen cada día lo mejor de sí mismos al servicio de Asturias») pero ni aun así consigue rebajar el enojo de los funcionarios. «Hicieron una gestión nefasta y ahora vienen con cartitas», afirma José Luis González, de USIPA. «Nos bajaron el sueldo, tuvimos que estar continuamente recurriéndolo todo, quitaron ayudas sociales que ahora tienen que pagar a los laborales y que no cobrarán los funcionarios, salvo sentencia, y encima pitorreo».

Javier Álvarez Villa, del Conceyu por otra Función Pública, rechaza también el contenido de la carta y precisa: «Contra lo que dice, no se dignificó nuestro trabajo, al contrario, se produjo una degeneración, un ataque al principio de imparcialidad que rige a la función pública. La carta es el colmo de la desfachatez».

Juan Gavira, de UGT, cree que frente al «idílico» panorama que describe Areces la realidad fue que «ni hubo transparencia, ni diálogo ni talante, hubo una judicialización permanente. Llegaron a hacer algo que nunca nadie antes hizo: despedir a una trabajadora laboral fija. Nadie lo puede hacer peor. Creo que los nuevos tendrán que entrenar mucho para empeorarlo».