Día para 'gourmets' en el San Agustín
La cocina de la comarca protagoniza la III Jornada Gastronómica del centro hospitalario
05.07.11 - 02:38 -
Si es verdad que fue Hipócrates quien pronunció esa frase lapidaria que dice ’que tu medicina sea tu alimento y que tu alimento sea tu medicina’, entonces el griego hubiese estado ayer en su salsa -nunca mejor dicho- en el Hospital San Agustín.
La razón no es que desde ahora se dispensen allí medicinas alternativas, ni mucho menos que sus profesionales hayan cambiado el vademécum por los tratados de farmacopea de la Antigüedad. Antes al contrario, la III Jornada de Gastronomía del centro sanitario, que se celebró a la hora del almuerzo, debe ser vista «como otra iniciativa más para implicar a la sociedad y las distintas entidades en la vida hospitalaria, además de dar a los pacientes un aliciente que haga más llevadera su estancia», en palabras de Alfonso Flórez, gerente del centro.
Y es que no todos los días pueden paladearse en la cama de un hospital público platos como ’Ensalada de bonito de la costera de Avilés con pisto de verduras’, ’Milhoja de sardina con jugo de pato’, ’Gochu asturcelta estofado en caldereta con torto’ y un ’Montadito de queso Gorfolí’ de postre. Sin embargo, esta iniciativa emprendida en 2007 ya ha sido copiada en lugares «como Lanzarote, Tarragona, Gijón y hasta en América Latina», especifica Flórez. Una señal sincera de éxito a la que no es ajena la implicación de un buen número de profesionales del sector de la alimentación de la comarca y de Asturias.
Al frente de ellos, una tríada de chefs formada por José Antonio Alonso (Restaurante Jose’s), Ramón Celorio (Restaurante Los Arcos, de Cangas de Onís) y Fernando Alonso Granda (jefe de cocina del San Agustín) se encargó de coordinar un equipo de profesionales volcados en confeccionar estas recetas. «Son platos sanos, con elementos de primera calidad y que rompen la rutina de una dieta de las que habitualmente se ofrecen en un lugar de estas características», señaló Alonso al respecto de los cerca de 400 menús que ayer degustaron otros tantos pacientes que, en cierto modo, pudieron «quitarse las penas» con unos platos suculentos y sabrosos. Todos con el factor común de denominación de origen asturiana de la mar, el monte o la huerta. «Y las tasas bajas en sal, grasas y el contenido alto en fibra, y nutrientes sanos, ecológicos», insistió José Antonio Alonso.
Labor de equipo fructífera
Pero ante todo, la de ayer fue una labor en equipo, en la que participaron también los cocineros José Ramón Otero, del NH Palacio de Ferrera, Nuria González, de La Corriquera (Posada de Llanera) y David Menéndez, de El Patio de Balbona (Pravia), todos ellos de la Asociación Anova + . Y en un ambiente amigable y sin dejar de guisar, freír, adobar, sazonar, servir y ’emplatar’, la presencia de las Cocineras de la Comarca de Avilés, creadas como marca de calidad por el Aula de Cultura de LA VOZ DE AVILÉS, dio pie a una mañana en la cocina del centro en la que el trabajo duro se dio la mano con la camaradería y el intercambio de experiencias.
Eso y alguna anécdota ilustrativa como la que protagonizaron Isabel Alonso, deL Restaurante La Tenada, de Illas, y Herminia Nuevo, de Casa Nuevo (Pillarno), que se conocieron en persona tras una larga temporada de contacto telefónico en la que sus respectivos establecimientos se han recomendado e intercambiado clientes en busca de la gastronomía de la zona. Junto a ellas, María José Martín, Arantxa Lucena y Fátima Hernández, integrantes de la citada marca, con Tatiana Blanco y Juani Lorenzo, de Mediterránea de Catering, participaron en este trajín que Alfredo Vázquez, director de operaciones de esta empresa, calificó de «verdadera experiencia piloto que Avilés ha importado con éxito y orgullo».
Y así, como prueba de que era un día especial, en las habitaciones del Hospital se dejaban sentir tanto el aroma de las ’delicatessen’ como la satisfacción de más de un sorprendido paciente. Ese fue el caso de Alberto Menéndez, que lleva varios días ingresado a cuenta de una fractura de tobillo y que ayer se deleitaba con estos platos como un verdadero ’gourmet’. «Está muy bueno, sí señor», comentaba con evidente satisfacción al degustar unos sabores insólitos para un lugar así.
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