«Somos nosotros los que costeamos la sanidad», afirman los proveedores

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El Sespa adeuda 208 millones en productos sanitarios y fármacos y retrasa los pagos hasta 356 días, según Farmaindustria y Fenin.

Foto: El consejero de Sanidad, José María Navia-Osorio, en su comparecencia del miércoles en la Junta. :: MARIO ROJAS

16.09.11 –El Comercio.

El anuncio del consejero de Sanidad de que dejaría de pagar a los grandes proveedores porque los bolsillos del sistema asturiano de salud «no dan para más» ha llevado a algunas empresas del sector a dar la voz de alarma para advertir de que la situación que vienen soportando «desde hace años» amenaza con convertirse en insostenible. «Somos nosotros los que en realidad financiamos la sanidad pública», reprochan. El panorama «ya difícil» amenaza con agravarse aún más si a los retrasos de hasta casi un año que suele acumular la Administración se suman, tras lo dicho por José María Navia-Osorio, los impagos.Las entidades que proveen de tecnología, prótesis, jeringuillas, gasas e, incluso, alimentos a los hospitales y centros de salud confirmaron que suelen cobrar sus facturas con una demora de más de nueve meses. La Federación Española de Proveedores de Tecnología Sanitaria (Fenin), que representa a más de 500 entidades de todo el país, indicó ayer a EL COMERCIO que a fecha del pasado 31 de julio, Asturias mantenía un retraso medio en los pagos de 288 días. Eso en materia de productos sanitarios, pero en medicamentos el aplazamiento es aún mayor: 356 días, según Farmaindustria.

La deuda que la sanidad asturiana tiene con las empresas que le proveen fármacos y materiales sanitarios asciende a 208 millones, casi el 70% del déficit que, según el Gobierno asturiano, alcanzará la sanidad a final de año. Los datos que manejan ambas entidades se desglosan de la siguiente manera: 118 millones de deuda corresponden a medicamentos (Farmaindustrias) y 90 millones, a productos sanitarios (Fenin).

El caso es que en lo que va de año, la mayor parte de las empresas que surten suministros a los centros dependientes del Sespa no han cobrado ni una sola de las facturas emitidas. Sin embargo, los materiales «han sido servidos en tiempo», afirman. La Federacíón Española de Proveedores de Tecnología Sanitaria (Fenin) alerta de que las empresas «no pueden soportar esta situación». Gloria Rodríguez, responsable de relaciones comunidades autónomas de Fenin, recuerda que el panorama se ha agravado con la crisis «porque los bancos no dan créditos». No obstante, recuerda que los servicios de salud, incluido el asturiano, «suelen ser muy malos pagadores, especialmente, desde el año 2002 cuando las competencias sanitarias se transfirieron a las comunidades autónomas».

De ahí que Fenin pida a las autonomías que «no se escuden en la crisis, ya que los problemas de morosidad en la sanidad pública existen desde hace años». Asturias ha sido la primera comunidad autónoma en anunciar públicamente que no pagará a los grandes proveedores. «Otros no lo dicen pero lo hacen», apunta Rodríguez. En todo caso, las empresas no buscan culpables y piden, al menos, Fenin «buscar soluciones imaginativas y afrontar el problema». Reconoce que tal y como funciona el sistema de pagos «son las empresas proveedoras las que financian la sanidad» desde hace ya algunos años.

Amenaza de cierre

Este periódico se puso en contacto también con la Asociación de Empresarios de Instrumentación Médico-Quirúrgica del Principado de Asturias (Adimpa), que engloba a una decena de firmas asturianas en las que trabajan unas 400 personas. Sus responsables declinaron realizar valoraciones sobre las palabras del consejero de Sanidad acerca de las dificultades para afrontar pagos pendientes en hospitales y centros de salud, aunque sí reconocieron que «hay gran preocupación» en el sector.

Un portavoz de la entidad explicó que la mayor parte de las entidades son pequeñas y medianas empresas que llevan años trabajando en la región y recordó que desde Adimpa «siempre hemos mantenido un buen nivel de colaboración con la Administración sanitaria y hemos buscado acuerdos». Estas firmas, que prefieren no avanzar su nivel de deuda con el Sespa, «son asuntos para tratar con la Administración», precisaron, son las que surten desde materiales de alta gama, como pueden ser las prótesis de cadera o de rodilla que se implantan a los enfermos asturianos, hasta suministros para la realización de curas y productos empleados en los laboratorios. No es la primera vez que los proveedores sanitarios del Principado tienen que hacer frente a aplazamientos en los cobros. De hecho, los retrasos son moneda corriente en la sanidad asturiana así como en el resto de servicios de salud del país, como confirma el dato facilitado por Fenin que sitúa la demora media de pago en Asturias en 288 días (más de nueve meses). No obstante, pese a la dificultad del panorama pintado por Navia-Osorio, desde Adimpa confían en «alcanzar una solución satisfactoria para todos» ya que la situación es muy apurada en algunas de las empresas que sin una respuesta rápida se verían abocadas al cierre.