Bomberos de Madrid abuchean a Botella en la apertura de las fiestas de la Paloma

 

«Tienen condiciones de trabajo que otros muchos quisieran», se defiende la Alcaldesa l El obispo de Bilbao pide que no se toquen los servicios básicos

Lne.es » España Madrid, Agencias

La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, inauguró ayer por la mañana las fiestas en honor de la Virgen La Paloma entre abucheos de los bomberos y otros colectivos públicos y los aplausos, en menor medida, de otros ciudadanos. Sobre las 12.30 horas, Botella bajó de su coche oficial y recorrió los 200 metros que la separaban de la parte trasera del templo entre gritos en contra de su gestión y de los recortes a los funcionarios.

 

Algunos de los presentes, que defendían a la Alcaldesa, increparon a los manifestantes, que portaban pancartas y camisetas alusivas a esos recortes, y les recordaron que La Paloma y sus fiestas son muy queridas en Madrid y que esta Virgen también es la patrona de los bomberos.

 

 

En total, fueron unas 200 personas las que acompañaron e increparon en todo momento a la Alcaldesa que, después de hacer una ofrenda floral, recorrió otros 300 metros entre abucheos para entrar por la puerta principal de la iglesia.

 

 

Tras la misa y tras haber observado las maniobras que, precisamente, los bomberos tienen que hacer para bajar un cuadro con la imagen de la Virgen, Botella saludó a las autoridades religiosas y salió de nuevo a la calle, donde volvió a ser pitada e increpada.

 

 

Preguntada por los medios de comunicación sobre estos abucheos, la alcaldesa de Madrid se defendió diciendo que «si la mayoría de los madrileños supiera cuáles son sus condiciones (de trabajo), a lo mejor pensaban que los bomberos no tienen tanta razón». Denunció Botella que este colectivo «se viene quejando casi siempre» y añadió: «Los bomberos, a los que todos apreciamos y apreciamos mucho su trabajo, tienen unas condiciones de trabajo que quisieran otros muchos madrileños».

 

 

En toda España fueron varios los políticos que se encomendaron a la Virgen en la festividad de la Asunción para que ayude al país a salir de la crisis económica actual.

 

 

Además de Botella, quien pidió «empleo» durante los citados misa y descenso del cuadro de la Paloma en la iglesia de la Paloma, el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna (PNV), pidió la ayuda de la Virgen de Begoña: «Los que somos creyentes, seguimos creyendo que nos puede echar una mano y que falta nos hará». «No sólo los políticos, toda la sociedad va a tener que hacer un esfuerzo tremendo», agregó el regidor bilbaíno.

 

 

Por su parte, el obispo de Bilbao, Mario Iceta, reclamó que «las necesarias reformas» que se tienen que acometer en la actual situación de crisis económica «no comprometan la garantía pública de servicios básicos», como la educación, sanidad, pensiones, asistencia a los ancianos y discapacitados, y protección de los desempleados. Asimismo, monseñor Iceta emplazó a instituciones, organizaciones y particulares a que «se impliquen en la creación de empleo», pero, matizó, «digno y justo», no un empleo «a cualquier precio»