El Sespa deberá pagar 30.812 euros a un paciente por no detectarle un tumor
El personal del San Agustín obvió realizar una ecografía al afectado, que la hizo en una consulta privada y que acabó operado en el Centro Médico de Oviedo
19.04.2013 | 00:00
Myriam MANCISIDOR El juzgado de lo social número 5 de Oviedo ha condenado al Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa) a pagar 30.812 euros a G. G. R.. Este hombre, paciente del Hospital San Agustín, fue diagnosticado el 11 de abril de 2011 en el servicio de Urgencias -adonde acudió por recomendación de su médico de familia- de «hematuria sin signos de alarma» (presencia de sangre en la orina) y derivado a la consulta de Urología del centro para su valoración. Tres días después, G. G. R. acudió a una consulta privada en la que, tras un estudio ecográfico y una citoscopia, el médico le dictaminó «carcinoma vesical de alto grado infiltrante» (un tumor agresivo en estado avanzado), recomendándole ser intervenido a la mayor brevedad.
Tras enviar un escrito sin respuesta al servicio de Urología del San Agustín exponiendo su caso, G. G. R. fue intervenido en el Centro Médico de Oviedo -de titularidad privada- el 10 de mayo. Los gastos médicos ocasionados ascendieron a 30.812, el dinero que reclamaba G. G. R. y que ahora debe abonarle el Sespa, de acuerdo a la sentencia firme dictada por el juzgado de lo social número 5 de Oviedo. El afectado reclamó en todo momento «los gastos médicos generados por la intervención quirúrgica que le son denegados por el Servicios de Salud del Principado de Asturias».
«Lo exigible en el momento y cuando G. G. R. acudió al servicio de Urgencias el San Agustín, ante la permanencia de la sintomatología que le acechaba semanas antes, hubiera sido que le realizaran las pruebas, entre ellas la ecográfica, donde se hubiera apreciado la patología que adolecía y se habría dispuesto de inmediato su ingreso en el centro», reza la sentencia, que precisa que cuando G. G. R. acudió a la consulta privada «aún no había sido llamado por la sanidad pública».
La patología que sufría el paciente, siempre según el documento judicial, revestía «extrema gravedad». «La necesidad de intervenir de forma inmediata derivaba del carácter infiltrante del tumor y su progresión rápida a otros órganos», señalan. Ante estos hechos, el Servicio de Salud del Principado de Asturias debe abonar a G. G. R. 30.812 euros.
Actualmente G. G. R. recibe atención sanitaria en el servicio de Urología del Hospital San Agustín. Le realiza el seguimiento el mismo médico que le operó en el centro privado ovetense.
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